lunes, 31 de marzo de 2014

Capitulo Tres

-¿Entonces no te vas?
-Ya te lo explique, no lo se.
-Pues yo creo que después de... Cuanto tiempo llevan juntos, ¿cuatro, seis años?
-Siete -suspiro, recordando como empezó su historia. Rousse no podía soportar el hecho de que papá saliera con otra mujer, y en cuando cumplió los dieciocho se marcho a Ibiza. Yo tenia ocho años, pero no recuerdo apenas nada, es como si mente hubiese borrado los recuerdos de mi infancia y de mis padres.
A los dos meses Ro me llamo, feliz, por que había conocido a Xabier, llevaban siendo novios desde entonces. Pero hace dos días, cuando Rousse le dijo que nos marchábamos unos días a Irlanda, Xabier rompió con ella, es algo que me extraña mucho, pero no hay nada que yo pueda hacer.
Ro lleva tumbada llorando en el sofá desde entonces; y esta tan deprimida que no me atrevido a preguntarle por el viaje.
-¡Pues mejor me lo pones! ¡Si tu hermana quiere deprimirse por que Xabier le ha dejado tiene todo el derecho!
-Tendrá todo el derecho, pero una ruptura no es el fin del mundo Ali.
-¿Como que no? Llevaban siete años, Serch, ¡Siete!
-Lo se, he sido yo quien te lo ha dicho.
Al suspira.
-Cualquiera diría que  lo que quieres es irte.
No puedo evitar reírme de un chiste de tan mal gusto.
-Sí, claro, eso es lo que mas deseo. -Ali vuelve a suspirar.
-¡Uggt! Vale, ya se que no, pero... No quiero que te vallas.
-Yo tampoco quiero irme, lo sabes.
El silencio se instala entre nuestras lineas de teléfono durante varios minutos.
-Al menos, promete que me contaras todo lo que pase. T.O.D.O.-añade exagerando.
-Todavía no me voy.
-Ya, pero prométeme que lo harás.
-Te lo prometo.

Dejamos de hablar después de unos pocos minutos.
Tengo mi maleta totalmente abierta en el suelo de mi habitación y varios momtañitas de ropa en mi cama y mi cámara de fotos en la mesa del escritorio.
 Todo dispuesto para guardar.
No estoy segura de hacer la maleta, por que no estoy segura de que vallamos a marcharnos.
Pero suspiro y voy colocando las pequeñas montañas de ropa en la maleta.
Segundos después aparece mi hermana por la esquina del marco de la puerta., tiene los ojos enrojecidos y sostiene una caja de pañuelos en el brazo.
-¿Haciendo la maleta, Serch?-la miro.
-Bueno, solo por si acaso.
Ella asiente.
-Mejor, por que mañana nos vamos.
-Estas segura de que no lo quieres posponer ¿Con...?
-En realidad, creo que mas me aleje de aquí mejor.
Asiento, lo entiendo.
Ella me sonríe triste y vuelve ha desaparecer por el pasillo.

Miro mi maleta, cojo un montoncito de ropa y lo coloco dentro.






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